31.5.10

VACIOS


Que distinto se siente,
Darse cuenta de lo que enfrentamos,
De lo que vivimos…

Solo para alimentarnos el ego
El uno al otro
Solo para sentirnos bien y ya…

Sin pretender en ningún momento
Ir más allá, conociendo la realidad
Que el otro construía.

Y haciendo vacios en mi vida
Porque a veces tú ya no cabías
Yo necesitaba espacios sin nada
Para poder pensar en ti… y respirar,
Y darte eso en lo que ya nada quedaba,
En lo que todo limpio estaba…

Y tú… esperando
En que yo me esforzará…
En meterte en eso vacíos
Tan tuyos, tan míos,
Pero en lo que no había cabida
Para ninguno de los dos, juntos…

En los espacios vacíos
Del cerebro, del corazón,
De nuestra habitación
Reservados sólo para estar ambos solos

Y al fin en los espacios vacíos
De la habitación te persigo
Con la mente y en el recuerdo
Te mantengo en el vació
Que llenas y de donde jamás saldrás.

Leyand

7.5.10

SIN ECO


Después de un ciclo de lunas transcurridas, de caricias ya casi olvidadas, de besos ahogados, de alientos tragados, de atardeceres solitarios, de ilusiones creadas, después de enterrado todo y de suspiros ya cansados… después de considerarlo como una potencialidad de cambiar mi vida y luego desechar la idea… ya aquí, al final de una nueva y emociónate experiencia aunque inconclusa, gracias a mi indecisión, él se aleja y tú regresas para tomar mi superficie y mi aliento, pero solo para consolar las emociones…

En mí ya no encuentran eco ni los besos arrebatados, ni los alientos mezclados, ni las caricias retomadas, ni la tarde compartida, ni la ilusión actuada, ni la luna acompañada. Ya no encuentran eco, las emociones retornan, y sin embargo sigo aquí ahora con la potencialidad real de cambiar mi vida, pero mantengo intacto el ir y devenir de lo que ya no siento y sólo compartir el recuerdo para crear otra nueva forma de estar al lado, de quien propone solo ser emoción y placer, pero todo para no quebrantar lo ya dado.

Leyand